Historia

El Pazo de Santa Teresa conserva algunas partes del siglo XIV (cimentación y muros bajos), si bien se construyó en el siglo XVI.

De principios de siglo

Entre otras estancias, cuenta con un torreón almenado, capilla y hórreo y en su fachada puede verse el blasón de la familia Prego de Montaos, sus primeros moradores. En concreto, el canónigo de la catedral de Santiago de Compostela, García Prego de Montaos, que también fundó el cercano convento de Vilavella. Uno de los propietarios más ilustres del pazo fue el obispo de Jaca Sarmiento de Sotomayor —que también era señor de Petán (en La Cañiza)— y que dio nombre a la casa a partir del siglo XVIII.

A principios del siglo XX, el pazo fue comprado por el industrial textil José Regojo para establecer su residencia familiar, bautizándolo como Pazo de Santa Teresa en honor de Teresa de Ávila, devoción que tenía su esposa, Rita Otero.

Las industrias de José Regojo, la mayor parte radicadas en Redondela, empleaban a más de 2.000 personas y contaban con la mayor fábrica de camisas de España, de la que hoy se conserva, en su emplazamiento original, a la entrada del pueblo, la chimenea principal.

Layer 9

Tradición familiar

En 1992, José Regojo –que formó parte del Consejo Privado de Juan III, abuelo del actual rey Felipe VI— recibió la Medalla Castelao, máxima distinción que otorga la Xunta de Galicia, y un multitudinario homenaje de sus trabajadores. Hoy día, la principal vía de entrada a Redondela lleva su nombre.

En 2009, los hijos de José Regojo acometieron la mayor rehabilitación del pazo en toda su historia. Gracias a ella, su muy amplia familia sigue reuniéndose en esta casa, que ahora usted puede disfrutar. Cuenta con dos amplios salones y una maravillosa escalera de acceso en maderas nobles, 15 habitaciones con baño y un salón de celebraciones y, en el exterior, un hermoso jardín con surtidor de piedra, lareira y varias especies arbóreas.